Bill Wyman lanzó hoy “Drive My Car”, su noveno álbum solista y el primero desde 2015, una mezcla magistral de su R&B angloamericano único. Disponible a través de BMG en formato digital, CD y vinilo desplegable. Tanto el CD como el formato digital cuentan con dos bonus tracks.
Como miembro fundador y arquitecto rítmico de The Rolling Stones, Bill Wyman se convirtió en una leyenda, venerado por fans y compañeros por igual. Con una carrera de más de seis décadas, Wyman vuelve al candelero con una nueva colección de canciones que muestran su pasión y talento. Cinco de los temas, incluido el que da título al álbum, son de su propia autoría, lo que demuestra el perdurable talento compositivo de Bill. “No es algo que haga todos los días, pero a veces simplemente veo una guitarra en un rincón de la habitación, la agarro para tocar y entonces algo encaja”, explica.
Grabado en el home studio de Wyman, “Drive My Car” cuenta con un grupo muy unido de colaboradores de toda la vida, entre ellos el guitarrista Terry Taylor y el baterista Paul Beavis. “Un bajista y un baterista forman un equipo, son la sección rítmica, la base de todo”, subraya Bill.
El álbum abre con una interpretación única de “Thunder On The Mountain” de Bob Dylan, que combina elementos tanto de la original de Dylan como de la animada versión de Wanda Jackson. “Conozco a Bob desde mediados de los 60”, comenta Bill. “Nos llevaba a Brian Jones y a mí a los clubes de Greenwich Village cuando estábamos en Nueva York. Fuimos muy buenos amigos durante un tiempo, era un tipo realmente agradable”.
Otro momento estelar es una descarnada versión de “Light Rain” de Taj Mahal. Bill recuerda su larga amistad, que comenzó en 1968, cuando Taj fue invitado a participar en el especial de televisión The Stones Rock ‘n’ Roll Circus. “Le fascinaba que yo fuera miembro de la Royal Horticultural Society… ¡Nos unía la botánica!”, recuerda con cariño.
El amor de Bill por la música country queda patente en un conmovedor homenaje a John Prine, con una versión de “Ain’t Hurtin’ Nobody”. “Éramos grandes amigos, y los Rhythm Kings hicieron algunos de sus temas. ¡Qué letrista! Me encanta esa línea de ‘Ain’t Hurtin’ Nobody’ sobre ‘Little Richard cantando Tutti Frutti desde lo alto de un poste de teléfono’, quiero decir, ¡¿quién escribe así?!”.
Además de homenajear a viejos amigos, Bill presenta a nuevos talentos como el guitarrista holandés Hans Theesink, cuyo trabajo inspiró dos temas del álbum. A pesar de no haberse conocido nunca en persona, Bill es un defensor de la nueva visión que Hans tiene del blues. “Su trabajo me parece realmente inspirador; aporta algo nuevo al blues”.
Bill Wyman tuvo un 2023 muy ajetreado, tanto mirando hacia atrás como hacia delante. El mayor de The Rolling Stones (“todos hablan de la guerra, ¡pero ninguno la recuerda como yo!”), Bill extrajo de sus recuerdos vívidas anécdotas de su infancia en tiempos de guerra y las publicó en un absorbente libro, “Billy In The Wars”. Al mismo tiempo, hacía planes para el futuro y grababa las canciones de “Drive My Car”.
Al reflexionar sobre el sonido del álbum, Bill cita a JJ Cale como una influencia importante. “Creo que la mayor influencia en el álbum en su conjunto es JJ Cale, su ritmo relajado siempre me ha atraído. Los amigos a los que se lo he tocado me han dicho cosas como ‘realmente suena como tú’, y eso me hace feliz. Nunca he intentado ser otra persona, básicamente soy Bill”.
“Drive My Car” es un capítulo nuevo y lleno de energía en la carrera de Bill, un testimonio de su pasión inquebrantable y de la alegría de toda la vida que siente al crear música, la cual sigue avanzando a toda máquina.